jueves, 27 de octubre de 2022

Beneficios


100 por ciento local:

Este tipo de cultivo puede ayudar a evitar el gasto energético del transporte de alimentos disminuyéndolo a cero. De la mata a la mesa, de esta forma podrás llevar alimentos frescos directo a tu hogar cultivados por ti.

Pasar tiempo en familia:

Cultivar un huerto es una actividad que puede realizarse fácilmente en familia de manera muy divertida y práctica. Los niños del hogar pueden participar moviendo la tierra, regando las plantas o recogiendo los frutos al momento de madurar.


Reduce el estrés:

En el huerto se viven momentos tranquilos ya que no es una actividad que se realice de manera acelerada. Al contrario se sigue un orden sencillo y rutinario que va cambiando según lo que cultives y la temporada. Este tipo de actividades puede servir a muchas personas como una terapia de relajación.




Conectar con la tierra:

Con los huertos se tiene la oportunidad de de disfrutar de ensuciarse con la tierra y sentirla en nuestras manos. Trabajar con la tierra nos permite comprender mejor el funcionamiento y crecimiento de nuestras cosechas creando un contacto con la naturaleza.




Cuidados del huerto

  • Riegue con regularidad, sobretodo en verano que se necesitará riego todos los días.
  • Arranque las malezas, evitando así que se confundan con las nuevas plantas de hortalizas o hierbas.
  • Coseche con frecuencia,  pode frutos y flores oxidadas, para así evitar un desgaste de energía a la planta.
  • Fertilice, o abone la tierra donde se transplantarán las hortalizas. Evite utilizar abonos frescos como: guanos y compost inmaduros, ya que ésto atrae hongos y al momento de la descomposición absorve el nitrogeno que está disponible para las nuevas plantas .
  • Utilice protectores para extender la estación.
  • Controle los insectos, con insecticidas orgánicos, para asi evitar esperar consumir éstas hierbas y hortalizas.
  • Utilice Tutores, en algunas especies como Habas y tomates, es necesario guiarlos.

  • CONTROLE LOS INSECTOS

    Vigile de cerca el control de plagas de insectos. Si existen algunos, puede sacarlos con la mano y así eliminarlos (píselas o vierta a un tarro de agua jabonosa). Gusanos picudos del tomate, escarabajos del pepino y saltamontes, son algunos de ellos. Si el problema persiste, vea la posibilidad de aplicar una solución que pueda usarse en hortalizas.

  • UTILICE PROTECTORES PARA EXTENDER LA ESTACIÓN

    En zonas de estaciones cortas donde las heladas pueden producirse en cualquier momento, es bueno proteger las plantas con cubiertas flotantes. Éstas, disponibles en viveros y centros de jardinería, están confeccionadas con un género ligero que transmite la luz y el agua, pero que atrapa el calor para acelerar la maduración y proteger del frío.

  • FERTILIZACIÓN DE LA HUERTA

    Mantenga el crecimiento vigoroso de los vegetales de maduración tardía, aplicando fertilizante con nitrógeno en forma esporádica. No fertilice en exceso las plantas que ya están produciendo, debido a que provoca que algunas hortalizas, en especial los tomates, dejen de producir. El ideal es el Fertilizante Específico para Hortalizas.

  • CONTINÚE PLANTANDO

    En las zonas con inviernos más crudos, la cosecha se puede prolongar hasta el invierno. Incluso acá puede haber tiempo para otros cultivos de hortalizas de verano de maduración rápida.

  • COSECHE CON FRECUENCIA

    Visite el jardín como mínimo día por medio para cosechar las hortalizas maduras. La mayoría de las plantas de hortalizas dejan de producir si no se cultivan con frecuencia.

  • RIEGUE CON REGULARIDAD

    Si deja que las plantas de hortalizas se sequen, muchas dejarán de producir, y de lo contrario, sufrirá la calidad de la cosecha. En el caso de tomates, pimientos y lechugas, sufrirán podredumbre apical, y los pepinos tendrán un sabor amargo.

    Por lo tanto, mantenga el suelo húmedo especialmente durante los períodos cálidos y riegue profundamente (por lo menos hasta 10 cm de profundidad), permitiendo que el suelo se seque parcialmente y vuelva a regar.

  • ARRANQUE LAS MALEZAS

    Retire las hierbas indeseadas, que se encuentren en el suelo, aplicando Bazooka (herbicida no selectivo) que elimina todas clases de hierbas de hoja ancha y angosta. Se aplica rociándolo directamente en las malezas, esperando 10 días hasta que se sequen. Posteriormente, limpie con un rastrillo.

    Ojo que las malezas compiten con las plantas de hortalizas por la luz, el agua, espacio y  nutrientes, y por lo general ganan la competencia.



 

miércoles, 26 de octubre de 2022

Características que debe tener un suelo para cultivar las hortalizas

 

ESPACIOSO Y AIREADO

Se necesita profundidad porque cuanto más profundo sea el suelo más espacio tendrán las raíces para extenderse. Así, los cultivos podrán crecer más. Piedras, rocas u otros elementos no deben estar en el suelo para no dificultar el crecimiento. Es muy importante también aportar materia orgánica para conseguir un terreno esponjoso y oxigenado.

BUENA CAPACIDAD PARA CONSERVAR EL AGUA

Encontrar el equilibro perfecto para el agua es otro punto fundamental. Hay que evitar suelos arenosos muy secos y aquellos que no retengan el agua. Si el suelo está demasiado tiempo sin agua se pueden pudrir las raíces.

RICO EN NUTRIENTES

Son los suelos arcillosos los que mejor retienen los nutrientes. Una forma de aumentar estas sustancias es aportando estiércol, compost o turba. En cuanto a los nutrientes minerales indispensables destacan: nitrógeno, fósforo, potasio, calcio, azufre, magnesio, hierro, zinc, manganeso, boro, cobreo, cloro y molibdeno.

VALORES DEL PH

Tiene que estar entre el 5,5 y el 8. El 80% de los suelos alcanza ese pH por lo que lo más probable que solo tengas que preocuparte de comprobarlo.



Plagas más comunes

 

LA MOSCA BLANCA

Es una plaga muy habitual en los cultivos. Son picadores-chupadores del material vegetal, dañando nuestro huerto ecológico. Se sitúan en el envés de la hoja por lo que a menudo si hacemos una pasada rápida de nuestras plantas no conseguimos verla. La manera de identificarla es muy fácil, y consiste en mirar en el envés de las hojas y observar puntos blancos, o bien mover la planta, la mosca blanca, que puede volar, saldrá revoloteando. Suele ser muy común en crucíferas, donde causan grandes estragos en los cultivos.


PULGÓN 

Los pulgones también son los grandes chupadores de nuestras plantas en el huerto ecológico. Forman una gran comunidad donde atacan en masa y de forma gregaria los cultivos. Además, también se asocian con las hormigas en un intercambio alimentación-protección. Las hormigas se aprovechan de la melaza azucarada que los pulgones producen y a cambio de esto, las hormigas protegen los pulgones de depredadores.


ARAÑA ROJA

La araña roja es un ácaro de muy pequeño tamaño (0,5 mm), que suele aprovecharse de las plantas de nuestro huerto ecológico cuando el ambiente es seco. Es una plaga fácilmente identificable porque teje telarañas alrededor del cultivo. A menudo observaremos hojas enlazadas por telas, o cuando la plaga está muy extendida, toda la planta rodeada de esta tela. Su modo de actuar consiste en chupar y succionar todo el material vegetal, por lo que, con el tiempo, debilita y desfallece a la planta. Mucho cuidado porque también se sitúan en el envés de las hojas, como la mosca blanca, por lo que en los inicios, lo mismo no podemos ver a a la araña roja con facilidad.




TRIPS

Los trips, de la orden de los tisanópteros, son unos pequeños insectos de pocos milímetros de tamaño. Son chupadores que se sitúan en el envés de la hoja, alimentándose de la savia de las plantas, debilitándolas lentamente. Existen tratamientos naturales y “plantas que curan plantas”, por lo que si controlamos el trips no tiene por qué llegar a ser un problema grave.


ORUGAS DE LA COL

Las orugas de la col aparecen frecuentemente en el huerto ecológico. Suelen ser comunes en crucíferas o brasicas, como repollo, coliflor, coles de Bruselas, etc. Las orugas se alimentan de las hojas, que en este caso no succionan si no que las muerden, a pareciendo agujeros u hojas  mordidas, dejando únicamente los nervios centrales.

ESCARABAJO DE LA PATATA

Esta plaga ataca principalmente a los tubérculos como la patata, pero en ausencia de ella, se pasa a otras solanáceas (berenjenas, tomates, etc). Los adultos sitúan sus huevos en el envés de las hojas, donde crecen las larvas que devoran rápidamente todas las hojas.



CARACOLES Y BABOSAS

Estos moluscos herbívoros se alimentan de las hojas de los cultivos del huerto ecológico. Provocan agujeros y mordeduras en las hojas y son fácilmente identificables porque dejan un líquido mucoso que al secar se adquiere un aspecto brillante. Salen cuando el tiempo está húmedo  (cuando ha llovido). Si hay muchos caracoles en el huerto, pueden llegar a producir daños graves sobre las plantas.

GUSANO DEL ALAMBRE

Este pequeño coleóptero que nos acompaña en nuestro huerto producen galerías en las raíces de nuestras plantas. La larva se asemeja al ciempiés (forma cilíndrica y longitud entre 2 y 5 centímetros). Causa estragos cultivos como la patata, donde construye galerías horizontales. Si el suelo es fresco y tiene humedad, eres más susceptible de recibir a este pequeño enemigo del huerto.



MINADORES DE HOJA

Estos pequeños dípteros construyen galerías visibles a ojo humano sobre las hojas de los cultivos. Cuando el daño es grande, provocan defoliaciones sobre los cultivos. Esta plaga es muy fácil de identificar y tan sólo nos basta con hacer una comprobación periódica de las hojas, sobre todo en verano, o cuando en temporada de calor.





¿Qué son las plagas?

 El concepto de plaga ha evolucionado con el tiempo desde el significado tradicional donde se consideraba plaga a cualquier animal que producía daños, típicamente a los cultivos. Actualmente se entiende como plaga la situación en la que un ser vivo, no necesariamente un animal, produce mermas a los intereses de las personas: plantas cultivadas, animales domésticos, materiales o medios naturales. Es decir, se ha puesto el foco de la definición desde la especie que causa los daños a la situación en la que esa especie está resultando dañina.

Se llama plaga a cualquier ser vivo que resulta perjudicial para otro ser vivo de interés para el ser humano. Existen plagas de interés sanitario, tales como los vectores de enfermedades humanas  y animales, tales como, mosquitos, pulgas o garrapatas, y las plagas agrícolas que afectan las plantas cultivadas, así como las cosechas, ya sean frescas o almacenadas.



¿Cómo se inicia un huerto?

 El lugar ideal: uno con luz directa y una toma de agua cerca

En la mayoría de las ocasiones no podemos elegir entre varias ubicaciones para el huerto y tenemos que adaptarnos al espacio disponible. La mejor orientación para ubicar un huerto en casa es aquella que nos permite una buena cantidad de horas de luz directa, normalmente orientación sur o sureste. También es importante valorar la disponibilidad de luz que tenemos en las diferentes épocas del año y qué tipo de cultivo vamos a realizar. Para el huerto se debe tener una toma de agua cercana que nos permita tomar la que necesitemos mediante una regadera o una manguera o poder instalar un sistema de riego por goteo, de acuerdo con el Manual huertos sostenibles en casa, que elaboró el departamento de Alicante en España.

Empieza por las hortalizas más amigables 

Las lechugas, los rábanos, la rúcula y los ajos son hortalizas de más fácil cultivo que otras, además se adaptan fácilmente a las huertos que se elaboran en recipientes de plástico pequeños, cuyo tamaño puede limitar el desarrollo de algunas hortalizas. El rábano, el chile serrano y la espinaca son hortalizas que, además, se dan todo el año. Acá podrás encontrar más información sobre las mejores hortalizas para iniciar tu huerto urbano.

Usa materiales reciclados                                                                                                                         

No necesitas comprar grandes utensilios para formar un huerto en casa. De hecho, lo más recomendable es comprar lo menos posible y usar materiales reciclados o que ya tenemos en casa o en la comunidad. Por ejemplo, un huerto urbano puede hacerse en un huacal de pan o fruta, cajones viejos, botellas de plástico o en una llanta ponchada, sólo necesitas adecuarlos a los cultivos.  

Combina, intercambia y rota cultivos

El departamento de Alicante, en España, recomienda no plantar la misma especie en un mismo recipiente dos veces seguidas, ya que es probable que el cultivo anterior haya agotado algunos nutrientes específicos y por tanto si repetimos la misma planta tendrá deficiencias. Por otro lado, si repetimos cultivo, tenemos más probabilidad de que la planta coja alguna enfermedad o plaga del cultivo anterior. A la hora de elegir las rotaciones tendremos en cuenta que después de un cultivo exigente en nutrientes será interesante cultivar una hortaliza poco exigente y/o mejorante (habas, cebollas, ajos…). En este video te explicamos mucho más.

No obstante, sí es común y positivo combinar cultivos buscando un beneficio en relación a la protección frente a plagas o el aprovechamiento de los recursos (agua, luz o nutrientes). Las asociaciones positivas, o plantas comadres como suelen llamarles, suelen producirse entre hortalizas muy diferentes (de diferentes familias y con diferentes partes aprovechables) ya que no competirán por los nutrientes.  

Hazlo biodiverso

Un huerto urbano ideal es aquel que consigue la mayor biodiversidad posible, por ejemplo, que en él se cultiven diversas hortalizas al mismo tiempo que plantas aromáticas o medicinales, y flores. Esto ayudará a conseguir un espacio de cultivo equilibrado, donde podamos atraer a fauna beneficiosa que nos ayude a controlar posibles plagas y enfermedades.






martes, 25 de octubre de 2022

¿Qué es un huerto?

 El huerto (o huerto de verduras y hortalizas) es una siembra de reducidas dimensiones y de cultivo intensivo con la finalidad de cosechar alimentos para el consumo familiar.​ Tiene su origen en el huerto tradicional europeo de pequeña extensión y por lo general dedicado al consumo familiar o la venta al por menor,​ síntesis de las culturas mediterráneas septentrionales (griega, romana y bárbara) y las meridionales (egipcia, mesopotámica y luego musulmana) del tipo conocido en italiano como (giardino dei simplice), o pequeño huerto doméstico.

Trabajos del huerto escolar